Unidades de Alta Complejidad

Unidad de fallo de implantación

La Unidad de Fallo de Implantación está dirigida a pacientes con imposibilidad de conseguir un embarazo después de completar un tratamiento de fertilización in vitro. Desde esta unidad de alta complejidad trabajamos multidisciplinarmente para optimizar la probabilidad de embarazo, diagnosticando y corrigiendo los eventuales factores implicados.

Unidad de fallo de implantación

El fallo de implantación constituye una de las situaciones más frustrantes, tanto para las pacientes como para los médicos. Se da en situaciones en las que, a pesar de ser todo favorable durante el tratamiento de fertilización in vitro, el embarazo no sucede tras la transferencia embrionaria.

La Unidad de Fallo de Implantación de Ginefiv incluye a su vez varias subunidades de apoyo que, conjuntamente, permiten un riguroso abordaje de esta condición (Unidad de Genética, Unidad de Ecografía de Alta Resolución, Unidad de Histeroscopia…).

Tras la realización de un protocolo diagnóstico personalizado y cuidadoso, definiremos las estrategias más adecuadas para optimizar las probabilidades de éxito en una nueva transferencia embrionaria.

¿Qué estudios específicos te vamos a ofrecer?

  • Pruebas de imagen: La Unidad de Ecografía de Alta Resolución permite descartar las posibles causas uterinas implicadas; la reconstrucción tridimensional del útero permite de ver posibles alteraciones morfológicas de la cavidad uterina, así como la presencia de miomas, pólipos o sinequias.Con este tipo de estudio logramos diagnosticar patologías que pueden no evidenciarse con las ecografías convencionales, como la adenomiosis, que afecta a la parte muscular del útero, o las alteraciones estructurales de las trompas que tienen un efecto extremadamente deletéreo sobre la implantación embrionaria.

    Desde la Unidad de Histeroscopia nos dedicamos al estudio de la cavidad uterina y de la corrección quirúrgica de la patología diagnosticada. Nos enfocamos en el diagnóstico de problemas que se han relacionado con el fallo de implantación como: la endometritis crónica, alteraciones en la ventana de implantación y/o alteraciones en la población de microorganismos que habitan la cavidad uterina (microbioma). Es lo que se viene denominando Test de Receptividad Endometrial.

  • Estudios inmunológicos (Unidad de Inmunología). En casos muy específicos, el factor inmunológico puede condicionar el fallo de implantación, por lo que la evaluación inmunológica puede ayudar a definir las estrategias más adecuadas.
  • Estudios genéticos: desde la Unidad de Genética podemos descartar alteraciones que puedan afectar:
    • A ambos miembros de la pareja: cariotipos, estudios de microdeleciones, etc.
    • Al embrión: en la actualidad podemos descartar la presencia de alteraciones cromosómicas en el embrión antes de su transferencia al útero. Hay que tener en cuenta que la presencia de aneuploidías (alteraciones numéricas en los cromosomas) es la causa más frecuente de fallo de implantación. Por ello recomendamos su realización en pacientes de edad avanzada (más de 35 años) o en aquellas que han tenido fallos recurrentes de implantación previos.
  • Estudios nutricionales (Unidad de Nutrición): cada vez hay más evidencia de que los hábitos de vida están claramente relacionados con el desarrollo inicial del embarazo.
  • Apoyo psicológico: El fallo de implantación es psicológicamente muy complicado para los pacientes, por lo que el apoyo emocional resulta fundamental para encarar un nuevo tratamiento. Nuestra Unidad de Psicología está especialmente dedicada al manejo de este tipo de casos, con estrategias estructuradas
  • Medicina regenerativa: en situaciones de falta de respuesta endometrial en la preparación o múltiples fallos de implantación de causa desconocida, existe la posibilidad de utilizar la medicina regenerativa.

    En Ginefiv llevamos a cabo este procedimiento a través del tratamiento con Plasma Rico en Plaquetas (PRP). Esta tecnología se utiliza de forma habitual en distintas áreas de la medicina, siendo uno de los pilares de la medicina regenerativa.

    El plasma se obtiene a partir de un simple análisis de sangre de la propia paciente y, una vez procesado, el PRP es instilado en el interior de la cavidad uterina, siendo un proceso que no precisa ni anestesia ni ingreso hospitalario.

    Aunque se trata de una técnica de desarrollo reciente, con evidencia aún limitada, los estudios sugieren que el PRP podría actuar sobre la superficie de la cavidad uterina, mejorando la implantación embrionaria.

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