En Ginefiv disponemos de varias técnicas avanzadas según qué valores patológicos encontremos a la hora de estudiar la fragmentación del ADN espermático.
En el caso de que la fragmentación alterada sea relativa a cadena única, disponemos de la técnica MACS que ayuda a minimizar este problema de infertilidad masculina en los tratamientos de reproducción asistida, mejorando la probabilidad de conseguir el embarazo en las inseminaciones u obtener mejores embriones en los ciclos de FIV.
La técnica consiste en poner en contacto los espermatozoides con unos marcadores unidos a microesferas metálicas. Estos marcadores se unirán a los espermatozoides que tienen el ADN fragmentado. Se hacen pasar por un filtro imantado, de forma que los espermatozoides con la fragmentación alterada se quedarán unidos al imán y solo pasarán los no dañados. Así conseguiremos una muestra en la que habremos eliminado un número muy alto de espermatozoides con el ADN fragmentado, lo que nos dará mejores resultados en el tratamiento.
En el caso de que la rotura sea en ambas hebras del ADN espermático, disponemos de la técnica Fertile chip®, que nos va a ayudar a minimizar el número de espermatozoides que tienen el ADN fragmentado. Esta técnica se basa en la motilidad de los espermatozoides, pues se ha descubierto que los espermatozoides con una mayor integridad del ADN poseen unos micromovimientos específicos. Gracias a esta técnica de selección, podemos filtrar aquellos espermatozoides con menores tasas de fragmentación